El ozono es un gas presente en la atmósfera que protege a los organismos vivos de los rayos ultravioleta y ayuda a limpiar el medio ambiente. En odontología, al igual que en otras ramas de la medicina, el ozono tiene numerosas funciones.
El ozono consta de tres átomos de oxígeno que tiene un efecto positivo en cualquiera de sus formas de presentación gas, aceite o líquido, resultando de gran efectividad sobre las bacterias con bajo o alto grado de patogenicidad, disminuyendo su número y capacidad reproductiva. La ozonoterapia es una alternativa novedosa, no traumática, indolora y no invasiva para prevenir y tratar las afecciones.
En la actualidad, se considera un tratamiento complementario en el cuidado bucal. La ozonoterapia se ha convertido en un tratamiento coadyuvante en el control y tratamiento de enfermedades dentales, dermatológicas y cosméticas, entre otras cosas por su capacidad antimicrobiana.
Los resultados sugieren que la ozonoterapia puede mejorar el tratamiento periodontal, facilitar la cicatrización de tejidos y complementar otras modalidades terapéuticas en odontología. La integración de esta técnica en la práctica clínica debe considerar tanto sus beneficios como sus limitaciones y basada en un enfoque individualizado del paciente