Efectos del uso de glucocorticoides en lesión aguda de médula espinal : revisión sistemática

Abstract

Introducción: La lesión de la médula espinal (LME) es una afección neurológica que causa importantes disfunciones motoras, sensoriales y autonómicas debido a un daño directo sobre las estructuras neurales, siendo la etiología traumática la principal causa. La LME se asocia a complicaciones severas y una alta carga socioeconómica. La resonancia magnética convencional juega un papel fundamental en el diagnóstico y manejo inicial. La terapia farmacológica, cuyo uso actualmente es controvertido, tiene mucha implicancia en la prevención de las complicaciones neurológicas. Material y métodos: Se realiza una revisión sistemática en base a las publicaciones de tipo ensayo clínico y ensayo controlado randomizado que integre toda la información pública disponible. Se llevó a cabo una búsqueda exhaustiva en cuatro buscadores/bases de datos diferentes: PubMed, Cochrane Library, Scopus, Google académico y Web of Science. Resultados: La búsqueda arrojó 49 citas, 12 de las cuales cumplieron los criterios de inclusión. Según los artículos de investigación incluidos, hubo evidencia moderada de que el régimen de Succinato Sódico de Metilprednisolona (MPSS) de NASCIS II (estudios nacionales sobre lesiones de la médula espinal aguda) de 24 horas no tiene ningún impacto en la recuperación neurológica a largo plazo. Sin embargo, también hay evidencia moderada de que los sujetos que recibieron el mismo régimen MPSS dentro de las 8 horas posteriores a la lesión lograron una moderada mejoría en la recuperación motora en comparación con los pacientes que recibieron placebo o ningún tratamiento. Conclusión: Una infusión de 24 horas de dosis altas de MPSS, el GCC más utilizado, dentro de las 8 horas posteriores a la lesión confiere un beneficio positivo en la recuperación motora a largo plazo y debe considerarse una opción de tratamiento para pacientes con LME. Sin embargo, el mismo régimen MPSS administrado después de 8 horas de la lesión demuestra no tener un impacto significativo en la recuperación neurológica a largo plazo